Capitulos:
12345
1 - Pero acerca de los tiempos y las ocasiones, hermanos, no tenéis necesidad de que os escriba.
2 - Porque vosotros sabéis exactamente que el día del Señor viene así como un ladrón por la noche.
3 - Cuando digan: ¡Paz y seguridad!, entonces, como el dolor a la que está de parto, vendrá sobre ellos destrucción repentina, y no escaparán.
4 - Pero vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas para que aquel día os sorprenda como un ladrón,
5 - porque todos vosotros sois hijos de luz, e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas.
6 - No durmamos, pues, como los demás, sino velemos y seamos sobrios.
7 - Porque los que duermen, de noche duermen, y los que se emborrachan, de noche se emborrachan.
8 - Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, vistiéndonos la coraza de fe y amor, y como yelmo la esperanza de salvación.
9 - Porque Dios no nos ha destinado para la ira, sino para alcanzar la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo,
10 - quien murió por nosotros, para que, ya sea que estemos despiertos o dormidos, vivamos juntamente con Él.
11 - Por lo cual, exhortaos los unos a los otros, y edificaos el uno al otro, tal como también hacéis.
12 - Y os instamos, hermanos, a que respetéis a los que trabajan entre vosotros, y tienen cuidado de vosotros en el Señor, y os amonestan;
13 - que los tengáis en alta y amorosa estima a causa de su obra. Tened paz los unos con los otros.
14 - Hermanos, también os exhortamos para que amonestéis a los desordenados, animéis a los desanimados, seáis apoyo de los débiles, pacientes con todos.
15 - Mirad que ninguno devuelva a otro mal por mal, sino procurad siempre lo bueno los unos para con los otros, y para con todos.
16 - ¡Regocijaos siempre!
17 - Orad sin cesar.
18 - Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús.
19 - No apaguéis el Espíritu.
20 - No menospreciéis las profecías,
21 - sino examinadlo todo; retened lo bueno.
22 - Absteneos de toda especie de mal.
23 - Y el mismo Dios de paz os santifique completamente, y todo vuestro ser: espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible en la venida de nuestro Señor Jesucristo.
24 - Fiel es el que os llama, el cual también lo hará.
25 - Hermanos, orad por nosotros.
26 - Saludad a todos los hermanos con ósculo santo.
27 - Os conjuro por el Señor que esta epístola sea leída a todos los hermanos.
28 - La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.